En tiempos de angustia, las preguntas pueden parecer sin fin. Has abierto tu corazón a Dios, pero cuando ves que las dificultades, simplemente, no desaparecen, te preguntas si Él te está escuchando. Encontrarás aliento y consuelo del ejemplo de la vida de Ana, una mujer en la Biblia que experimentó dolor profundo y oró sin recibir, aparentemente, una respuesta.?
Sí, tú eres preciosa para Dios. Él conoce los anhelos de tu corazón, incluso más que tú. Pon tu confianza en Él y descansa... mientras esperas el desarrollo de su plan para tu vida.