En pocas ocasiones un libro escrito para pastores, obreros cristianos y laicos habrá recibido una atención tan amplia y una lectura tan intensa como la que ha recibido Capacitado para orientar.
Ha obtenido el puesto de un clásico en el campo de la orientación cristiana.
El nuevo y alentador enfoque a la orientación por el que se aboga en Capacitado para orientar, establecido y de manera firme como orientación noutética (de la palabra griega nouteteo, amonestar, advertir, instruir), resultó ser, evidentemente, un método de orientación buscado por muchos que pueden haber sospechado que las técnicas seculares de orientación eran, no solamente antitéticas ala verdad bíblica, sino, además, asombrosamente estériles e inefectivas.
El enfoque totalmente bíblico del doctor Jay Adams ofrecía un bienvenido escape de los desgastados carriles de la psiquiatría secular.
Capacitado para orientar ha constituido la sementera de la que han emergido otras numerosas publicaciones de Adams.
Para comprender la razón por la que sus libros son ávidamente leídos por tantos cristianos, y por qué miles de cristianos han hallado que la orientación noutética es tan satisfactoria, se tiene que volver a Capacitado para orientar.
En él, Adams denunció la naturaleza de las técnicas freudianas y rogerianas y delineó lo que él denominó: orientación noutética.
Se debe también señalar la pronta insistencia en que todos los cristianos pueden devenir en consejos competentes, bien calificados para orientar.