La predicación en la Iglesia es la verdadera alma del ministerio pastoral de Juan Calvino, y ésto fue lo que dio forma a su obra como teólogo. Calvino fue fundamentalmente un predicador. Su mensaje en el púlpito estaba dominado tanto por la reverencia hacia la Sagrada Escritura como por el sentimiento de la dignidad y responsabilidad de la misión de predicar la Palabra de Dios.
Los sermones sobre la Epístola a los Efesios fueron predicados entre 1558 y 1559, cuando Calvino comenzó a recoger los frutos de veinte años de ministerio y de intensas luchas. En ellos, la voz de Calvino resuena llamando siempre a la conversión al Evangelio y a la reforma de la vida de los creyentes y de la Iglesia, bajo la autoridad soberana de las Sagradas Escrituras. Ahora, unos 450 años después, los sermones de Calvino sobre Efesios, por primera vez en la Historia, están disponibles en español.
Esta segunda edición ha sido completamente revisada, por lo que se han corregido algunas erratas detectadas en la primera edición.