Una iglesia Irresistible le mostrará cómo su congregación puede ser usada por Dios de maneras increíbles una vez que se apropie de doce principios prácticos que despertarán los aplausos del cielo.
Cuando una iglesia tiene hambre por la presencia de Dios promueve relaciones saludables y conecta todos sus recursos a la misión de llevar el Evangelio y hacer crecer a los cristianos. Así, ella se torna vibrante e irresistible para Dios, y para las personas.