Este libro es una fuente de agua espiritual inagotable para toda una vida. Es un tesoro escondido forjado en la oscuridad de la madrugada, en el calor del mediodía, en el yunque de la experiencia, y golpeado duramente hasta que el toque divino lograra algo maravilloso. Su autor relaciona de forma magistral la oración con la fe, la confianza y el anhelo.